El recurso más valioso en cualquier empresa u organización es su personal. Un ambiente laboral basado en relaciones de trabajo positivas y en el que se fomenta de forma activa el desarrollo profesional de los trabajadores contribuirá a su felicidad y eficiencia y, a la larga, al éxito de la compañía.
El recurso más valioso en cualquier empresa u organización es su personal. Un ambiente laboral basado en relaciones de trabajo positivas y en el que se fomenta de forma activa el desarrollo profesional de los trabajadores contribuirá a su felicidad y eficiencia y, a la larga, al éxito de la compañía.
Un buen documento de trabajo no solo facilita la labor de todos los equipos involucrados en la planificación de una operación MICE, sino que, a la larga, permite ahorrar tiempo y dinero. Por eso se le ha de prestar la debida atención y no dejar ningún detalle fuera.
El estudio de la mente puede ayudar a conocer mejor al público y anticipar sus necesidades. Además, aplicando la psicología en la planificación y diseño de las operaciones MICE, los organizadores pueden influir en la conducta y decisiones de los asistentes y conseguir un mayor impacto.
El regreso a los encuentros presenciales ofrece la oportunidad de conectar con los asistentes de manera significativa, pero también plantea desafíos para mantener su atención y generar interacción. Es esencial convencer a los participantes de que asistir vale la pena y captar su atención en todo momento.
La coexistencia de profesionales de diferentes generaciones en el entorno laboral es cada vez más habitual en países con una población que envejece. Lejos de ser un problema, si se gestiona debidamente, esta diversidad puede aportar beneficios tanto a la empresa como a los propios individuos.
Una buena parte de la comida que se sirve en los eventos termina en la basura, contribuyendo a un problema global que se ha de abordar urgentemente como parte de la lucha contra el cambio climático. La solución al desperdicio alimentario pasa por la concienciación de empresas y ciudadanos y una mejor planificación.
Los nuevos profesionales están acostumbrados a comunicarse de forma instantánea a través de las apps de mensajería y redes sociales. Las empresas y organizadores de eventos han de tener en cuenta sus preferencias a la hora de captar su atención. Porque tan importante como atraerla, es no ser intrusivo en el proceso.
En la reactivación pospandemia, la oficina ya no es un lugar impuesto y único. Los profesionales, sobre todo los más jóvenes, exigen elegir dónde, cuándo y cómo llevar a cabo sus tareas siendo ellos quienes definen en qué entorno son más efectivos y pueden cuidar de su salud mental.
La falta de personal está afectando a muchos sectores tras la pandemia y pone en peligro la recuperación de la industria MICE. Retener y atraer a trabajadores cada vez más exigentes requiere un mayor esfuerzo que pasa por entender sus necesidades, y sobre todo, ofrecerles flexibilidad.