En una producción cinematográfica, equipos de personas que no se conocen deben, en poco tiempo, aprender a compenetrarse y trabajar al unísono para conseguir un buen resultado. Esta experiencia, junto con el conocimiento del mundo empresarial, llevó a los actores españoles Antonio Resines, Tamzin Townsend y Coté Soler a fundar BeLiquid. Sus propuestas de team building se basan en ayudar a las empresas a desarrollar habilidades blandas (soft skills o power skills), tales como como la comunicación, el liderazgo, la creatividad o la gestión del cambio, utilizando técnicas de las artes escénicas.

Guiados por actores, los participantes se ven inmersos en diferentes dinámicas en las que conectan unos con otros a nivel personal, a la vez que aprenden. A través de juegos, equipos cuyos miembros no tienen en principio afinidades pueden aprender a escuchar y desarrollar empatía. Colegas que llevan años trabajando juntos practicarán, sin apenas darse cuenta, técnicas de feedback constructivo que pueden ayudar, por ejemplo, a tener conversaciones difíciles. Las dinámicas suelen ser grupales para que nadie se sienta intimidado, ya que el objetivo principal es pasarlo bien relacionándose con los compañeros, aprendiendo y haciendo equipo.