Por Rocío López Alemany
Cancelaciones de vuelos, problemas de salud, robo de documentos o material de trabajo, pérdida de equipaje… son incidencias desafortunadamente comunes a las que se suman realidades que están condicionando sobremanera los viajes profesionales, tales como las catástrofes naturales o los atentados terroristas.
Ante esto nos planteamos ¿es importante contratar un seguro de viaje? La conclusión a la que llegamos tras hablar con los proveedores de este sector es rotunda: sí. Los seguros no pueden evitar las incidencias, pero sí paliar las consecuencias. Contratar una póliza que cubra todos aquellos aspectos que puedan preocupar al viajero no solamente es un modo de protegerle y reducir su estrés: también una manera de ahorrar dinero en caso de problemas, ya que solicitar una cobertura médica en casos graves en destinos como Estados Unidos o Japón puede trastocar más de un presupuesto.
Viajar sin miedo
Como transmiten muchas aseguradoras, no se trata de inculcar miedo sino de viajar con responsabilidad. Por eso son varias las compañías que han creado productos específicos para las empresas en los que se incluye la suspensión del viaje sin coste, el reembolso de los gastos previos a la asistencia a un congreso cancelado, la pérdida de una conexión aérea o asistencia legal en caso de conflicto.
Precisamente una asistencia de calidad durante las 24 horas del día y en cualquier día de la semana es otro de los aspectos más valorados por los clientes.
La creciente oferta de seguros adaptados a los viajeros de negocios responde a un aumento de la demanda, fomentada por las cada vez más frecuentes huelgas de los transportistas o las nuevas exigencias de algunos destinos a la hora de recibir visitantes: seguros de salud o un carné de vacunas actualizado forman parte de estos nuevos requisitos.
Según los proveedores, es imperativo educar a las empresas para que tomen responsabilidades y sean conscientes de que las necesidades de sus representantes deben estar subsanadas incluso antes de que se produzcan. No obstante, parece ser una realidad que ya se han dado cuenta de ello: la seguridad del viajero se encuentra en el punto de mira y éste es un argumento cada vez más recurrente entre los clientes que demandan planes adaptados.
Situaciones imprevisibles
Aunque los problemas más comunes están relacionados con cancelaciones, cuestiones de salud o accidentes en carretera, la lista de posibles situaciones que preocupan a las empresas no deja de aumentar.
En los últimos meses, los cambios políticos han entrado a formar parte de las inquietudes entre quienes requieren una póliza adecuada para sus representantes. En los casos más extremos pueden conllevar la repatriación de los viajeros. Con un seguro, éstos tendrán preferencia para abandonar el destino a la mayor brevedad posible.
Preocupaciones permanentes
Las cancelaciones son lo que más preocupa a las empresas y no solamente por las posibles suspensiones por parte de los proveedores: la libertad para cambiar un programa de citas que incluya la anulación del viaje es especialmente valorada, tanto como una amplia cobertura médica que evite sorpresas en caso de que el representante deba acudir a un hospital. Por eso varias aseguradoras proponen cobertura de salud ilimitada.
La salud, seguridad, protección y bienestar del representante es responsabilidad de la empresa, por eso un seguro de viajes es en realidad un instrumento que facilita los negocios.
Para este tema hemos entrevistado a:
Katia Estace Gil
Directora de Travel de AON Risk Solutions
“La salud es la principal preocupación del viajero”
Óscar Esteban
Director Comercial y Marketing de ERV
“Un seguro evita que un incidente arruine un viaje”
Verónica Herrando
Directora Comercial Europ Assistance
“Contamos con acuerdos con los mejores hospitales del mundo”
Javier Selma
Responsable de la división Corporate de InterMundial
“La empresa quiere sentir que todo está bajo control”
Fernando Sena
Gerente Regional de Comunicaciones Institucionales
“Hay clientes que aún no perciben este servicio como una clave”